Santero y los Muchachos. sala El Sol

 

Hablar de Santero Y Los Muchachos es hablar de una de las mejores bandas de rock reposado que hay en el panorama actual, Miguel Angel Escrivá, Josemán Escrivá, Soni Artal y Marc Guardiola forman un cuarteto elegante, compenetrado, con personalidad propia y encima son guapos.

¿Se podría pedir más? , pues sí, unas letras acidas, que dan en la diana, que revientan almas con la pasividad que cae la ceniza de un cigarro sobre el suelo.

Un aroma a bourbon reposado, lleno de especias y la sensación de estar viendo a una banda artesanal, encaje de bolillos, costureros de un traje a medida para el melómano que pone su LP y dedica tiempo en degustar ese sabor durante horas y horas de escucha.

VENTURA es su trabajo, portada en blanco y negro bello como pocas, un disco que proyectado en un concierto acústico funciona a la perfección, como la estructura de una bomba que nunca estalla, late, late, parece que va a reventar el escenario, pero al final le cortan el cable rojo para desactivar su carga.

“Abrácese quien pueda”, “Déjame Ser”, “No te despidas de México”, “Homenaje”, “ Buenos y Malos” y “Gusano” Bonus Tracks del CD, “Amigo Infiel”, “Este donde este”, una perfecta cover de “Quizás, quizás, quizás”, “Ventura”, “Relax Vaquero”(precioso homenaje), “Oaxaca”, “Aun” y “Dani Boy” flotaron en la sala El Sol como los susurros al oído de dos amantes untados en aceite sobre una cama de agua.

Se echó más de menos un poco de silencio por parte del público, el concierto lo merecía, pero a veces es complicado dejar la mente en blanco la lengua guardada y el corazón en un cuenco, caliente y humeante, mientras se disfruta de las sensaciones que nos transmitieron estos señores.

Son un pedazo de banda.

Me Quito el sombrero.

Texto: David Prida (Django Desencadenado)

Fotos: David Prida (Django Desencadenado)