Si una palabra puede definir a las dos bandas que cerraron la jornada del sábado en el HDC Rocki’n Fest es ENERGÍA. Viejos conocidos del público más Gourmet son los chicos de Travellin’ Brothers, una banda que arrasa por todo el territorio que pisa, expertos en agitar pies y crear sensaciones, unos veteranos del foso y de las tablas , que con su último discazo no han hecho sino confirmar que es una pedazo de formación de blues, camaleónica y con una seriedad cachonda, que nos hizo disfrutar como enanos. Disparan sin pudor, tocan de Re-dios y les pego un aplauso que se va a oír hasta Euskadi.
The Trouper’s Swing Band son todo un descubrimiento, presentación de personajes con la melodía del Padrino de fondo, marcha fúnebre que no hizo sino presagiar una tormenta de baile y ritmo con peso, un bloque de hormigón musical que va cayendo del cielo buscando presas que aplastar, achica el espacio hasta que te pilla, y cuando te trinca te deja los huesos triturados, las tripas por el suelo y el cerebro dinamitado. Vaya pedazo de banda. El público que asistió al Rocki’n Fest puede decir que fue afortunado de presenciar la actuación de dos bandas enormes.
Foto: Django
Texto: Django.